Para los propietarios que deciden comprar un camión articulado usado, es importante hacer una inspección minuciosa previa a la compra de los equipos que están considerando. Comience por verificar el valor real para ver si los modelos que busca tienen el precio adecuado. No pierda tiempo en la inspección de camiones que no tienen el precio adecuado para ese modelo, año, millaje y fabricante. Una vez que acotó sus opciones, llame para programar las inspecciones.
HISTORIA DEL CAMIÓN
La mayoría de los motores de camiones articulados funcionan hasta un millón de millas con los cuidados adecuados, así que más importante que el número que figura en el odómetro es la historia del mantenimiento y un informe de inspección favorable. Esos dos registros le darán la confianza de comprar sabiendo que el camión está en buenas condiciones de funcionamiento.
CONDICIÓN DEL CAMIÓN
Una inspección previa a la compra es similar a la inspección previa a un viaje para la CDL, pero requiere una evaluación más exhaustiva. Si conoce la mecánica y los componentes del camión, puede usar las siguientes pautas para completar una inspección por su cuenta. De lo contrario, le conviene recurrir a un profesional para que haga la inspección.
Verifique el bastidor: los daños en el bastidor de un camión articulado son costosos de reparar, pero no repararlos puede causar un desgaste severo en los neumáticos. Busque fisuras, curvaturas, hundimientos o soldaduras.
Verifique si hay óxido: el óxido en el exterior del camión es una señal de advertencia. Inspeccione todos los pernos, las tuercas de las llantas, la carcasa de los faros y los paneles de la carrocería. Examine las puertas y preste mucha atención a las bisagras y los bordes exteriores.
Examine los neumáticos: inspeccione los neumáticos de tracción para asegurarse de que sean del mismo fabricante, del mismo tamaño y tengan el mismo desgaste. Busque fisuras o protuberancias.
Inspeccione el escape: cuando el motor está caliente, observe si hay humo en el escape. Un sistema de escape que está quemando aceite va a largar humo; uno que esté limpio no lo hará.
Verifique los frenos de tambor: busque fisuras, corrosión, filtraciones o cualquier cosa irregular. Verifique también las pastillas de freno. Si bien el cambio de pastillas no es una reparación costosa, es bueno saber cuál es el estado.
Pruebe el asiento y la litera: verifique si el asiento es cómodo y si todos los ajustes funcionan. Si inspecciona una cabina dormitorio, pruebe la litera. Un techo de altura media o alta agrega espacio y comodidad, y puede valer la pena si piensa pasar largos períodos en el camión.
Encienda las luces: pruebe los faros y las luces de freno, y pida al vendedor que confirme si funcionan como corresponde.
Busque filtraciones: inspeccione el radiador y todas las mangueras para ver si hay señales visuales o auditivas de filtraciones.
Toque las correas: pase la mano por las correas y sienta si hay anormalidades, si están deshilachadas o si hay fisuras. Las correas no deben estar ni muy sueltas ni demasiado ajustadas. Busque una holgura de entre ½ y ¾ pulgada.
Verifique el aceite: los niveles de aceite deben estar en la línea máxima en la varilla medidora y el aceite se debe ver relativamente limpio.
MANEJO DEL CAMIÓN
Si todo se ve bien, está listo para una prueba de manejo. Observe cómo el camión acelera y desacelera, cómo funciona y cómo se siente la suspensión. Escuche con atención si el motor o los frenos hacen ruidos que puedan indicar un problema no detectado.
Si desea que un profesional haga la inspección previa a la compra, contacte a los expertos en Papé Kenworth. Nuestros técnicos de mantenimiento están muy entrenados en todas las marcas y modelos, y pueden ayudarle a sentirse seguro de su compra.
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